06 octubre 2003
Día de la "SANTINA" (Sub)
Sumergida en el lago Enol, se encuentra una imagen de la Virgen de Covadonga, visitada cada año por los buceadores asturianos, desde su entronización subacuática en el año 1972...
      El ocho de septiembre, el Principado de 
Asturias celebra su fiesta autonómica, Nuestra 
Señora de Covadonga, cariñosamente llamada por los  
asturianos "Santina, porque ye piquiñina 
y galana", como dicen las muchas tonadas asturianas dedicadas a nuestra Patrona 
y Señora. En ese día,  el Santuario de Covadonga se ve desbordado por la 
afluencia de visitantes, que quieren rendir culto a la Santina. 
      
  
A once kilómetros del Real Sitio, situado en el Parque Nacional de la Montaña 
  de Covadonga, se encuentra el mayor de los dos lagos de este precioso parque, 
   
   el   Enol. En pleno macizo occidental 
de los Picos de Europa, a 1070 metros de 
altitud sobre el nivel del Mar, con una superficie de 12,15 Hectáreas y una 
profundidad máxima de 24 Metros, (profundidad constatada por nuestro grupo, allá 
por los 70). Es aquí, en una pequeña cueva situada a ocho metros de profundidad, 
donde tenemos a nuestra Santina sumergida desde hace 31 años... y cada año, con 
frío,  niebla,  lluvia o calor, volvemos a encontrarnos los de 
siempre... más las nuevas generaciones que se van sumando a este entrañable 
acto, que se ha convertido en peregrinar anual de todos los buceadores 
asturianos a nuestra "Santina sub", deseosos de que pase pronto el año, para 
volverla a ver.  
     En 1972, 
la sección de Actividades Subacuáticas del club Cañapescamar, sucesora del A.P.I.S.  
(Asociación de Pesca e Investigaciones Submarinas), club pionero en los años 
cincuenta de las Actividades Subacuáticas del Principado, deciden hacer, con 
restos de fusiles submarinos fundidos, una imagen de la Santina, solicitando a 
su vez todos los permisos necesarios para sumergir la imagen en el lago Enol; 
fueron muchos los trámites requeridos para ubicarla en este paraje sin igual, 
(no olvidemos que desde 1918, la montaña de Covadonga fue declarada Parque 
Nacional).
       
   
Historia: Mucho fue el trabajo, pero más el entusiasmo, que llevaron 
  a término una idea nacida de unos amigos que tenían en común, la devoción a 
  la Santina, y la pasión por el buceo. Recuerdo   
  con cariño al desaparecido Arroyo, presidente del S.A.S. del Cañapescamar, padre 
  y gestor del proyecto, fue un hombre con una gran capacidad de gestión que unida 
  a su afición, le llevó a ser una de los pilares  más importantes  
  en la promoción y consolidación de las Actividades Subacuáticas en el Principado 
  de  
Asturias, aunque tristemente  su gran trabajo esté poco reconocido y 
  olvidado... Pero el alma de esta fiesta, desde sus inicios, es sin duda José Luis Gato, 
quien cada año nos recuerda a todos la cita; jamás ha faltado al 
  encuentro junto a su mujer Paquita, quien vela por el aspecto de la Santina, 
  dándole retoques de pintura allí donde son necesarios, el altar, las flores 
  etc..., Nedo, Alija,  Kike,  José Miguel, Antón, Marivy... y otros, de igual relevancia, 
  que ya forman parte de la historia  de este entrañable acto, registrado 
  en la gran Enciclopedia Asturiana.
 
    
        Celebración: 
  Quedamos a las once de la mañana en el lago, nos sumergimos en las gélidas 
  aguas del Enol (de origen glaciar), una hora más tarde después de hacer todos 
  los preparativos, señalizamos el lugar exacto de la imagen, y uno a uno vamos 
  bajando para evitar en lo posible, el levantamiento de lodo, que  al poco 
  tiempo hace imposible la visibilidad. 
Una vez subimos a la Santina a su pedestal flotante, la gente que se encuentra 
  rodeando el lago, rompe en aplausos emocionados, una emoción que contagia a 
  todo aquel que acude por primera
 vez, haciéndolo volver. 
La llevamos en procesión 
  hacia la orilla, donde previamente se ha levantado el altar  que acogerá 
  a Nuestra Señora y
 donde el sacerdote  celebrará la Santa Misa, siendo los buceadores invitados 
  de  honor, en lugar destacado; en  ocasiones la Misa es acompañada por gaitas y tambores, además 
  de las tonadas 
asturianas que la gente le canta a su patrona, tan querida y especial, que no  
conformándose con verla, quieren tocarla, sentirla, aguardando en silencio su 
turno. Finalizados los actos los buceadores la volvemos a llevar a su cueva sub, 
bajo las aguas del lago Enol, donde nos aguardará un año más para volvernos a 
reencontrar y celebrar nuevamente, su día, el día de Nuestra Señora de 
Covadonga, fiesta Patronal del Principado y fiesta de los buceadores con su 
Santina sub".